¿Mucho por hacer, cero avance? Bienvenido al club.
Algo me dice que eres de esos que tienen 40 mil pestañas de Chrome abiertas.
O de tu navegador favorito, porque hay gente que usa otros. Acá no juzgamos.
Mentira, sí. Pero es con cariño.
O quizás eres de los que tiene una lista enooorme de pendientes. O ni tienes lista, sino tu mente atiborrada de “tengo que hacer esto, que no se me olvide”, que es aún peor.
Otra muy común es empezar tu mañana pensando en eso que sí o sí vas a hacer. Notaste que para hacer algo de eso debes enviarle un correo a algún colega o cliente.
Abres los correos, ves que tienes muchos sin leer, así que empiezas a borrar algunos, responder otros. Abres el primero, quizás el segundo… y te entró un mensaje de WhatsApp.
Lo respondes. Pero ves otro poco de mensajes sin responder.
Uno de ellos es un enlace a Instagram. Entraste a verlo y… de repente son las 10 de la mañana y ni te diste cuenta.
Te enteraste porque te sonó la notificación de la reunión de las 10. Será una reunión larga.
Mejor dicho, se te pasó toda la cochina mañana y no hiciste un carajo.
Me ha pasado, me pasó mucho.
Y eso es horrible, no solo porque no te rinde y no produces, sino porque eso te hace sentir menos valioso, te frustra, hasta te hace doler la cabeza.
Sí, es contigo Lore.
Estar (o sentirse) ocupado es casi que una enfermedad. Silenciosa. O un síndrome.
Que me perdonen los médicos o personajes de la salud. Soy ingeniero, sabrán entender.
Pero me entienden el punto. Vivir ocupados no es lo mismo que ser productivos.
Otro síntoma de improductividad es tener muuuuchas ideas, pero no concretar ninguna.
Eso le suele pasar a la gente pila, a la gente inteligente. Pero ideas sin ejecución son un pajazo mental. Es lo mismo que nada.
El cementerio está lleno de buenas ideas que nunca vieron la luz.

Síntomas de que no estás siendo productivo
En concreto, tienes un negocio, una marca personal o un puesto ejecutivo.
- Tienes claro que podrías lograr más… pero no sabes por dónde arrancar.
- A ratos te sientes productivo, pero si te preguntan qué lograste esta semana… grillos.mp3.
- Tu lista de pendientes crece más que tus ingresos.
Mi diagnóstico, así sin conocerte.
- No es falta de ideas.
- No es falta de capacidad.
- Es exceso de carga mental, autosuficiencia tóxica y CERO foco estratégico.
- Querer hacerlo todo solo es una forma elegante de autosabotaje.
- Y creer que “algún día” tendrás tiempo para todo… es creer en unicornios con MBA.
¿Cómo me fue? ¿Le atiné a algo?
- Entonces… ¿Qué pasaría si en vez de hacer más… hicieras lo que SÍ mueve la aguja? (Objetivos SMART)
- ¿Qué pasaría si delegaras el 80% de lo que te tiene atrapado? (Ley de Pareto).
- ¿Y si tu día tuviera una sola prioridad en vez de 24 tareas? (Focus, focus).
Mis consejos…
…para ayudarte así rápido rápido:
Anota todo lo que tienes que hacer. Si tienes tiempo, anota tooodo, no importa cuándo lo planeas hacer (mi lista tiene más de 200 cosas, jajaja).
Organízalas de alguna manera. Por tema, por dificultad…
Mi tip acá es que lo hagas por urgencia, y luego por importancia.
Saca de esa lista lo que no es ni urgente ni importante, y lo pones en otra lista. La lista B, la banca, la suplencia. En fin.
De la lista que te quedó, resalta lo que puedes hacer en menos de 5 minutos. ¡Y hazlas! Todas las que puedas.
La paz mental que da tachar cosas de una lista es monumental (así como la frustración de tener una lista eterna que solo crece y crece).
De las que queden, saca las urgentes, las que te quitan paz. Y delégalas o hazlas.
Del resto, prioriza por fechas, y te separas un par de horas al día solo para ellas.
Usa la técnica pomodoro. No hagas nada más, apaga notificaciones, no mires correos. Solo dedícate a hacer eso.
Y empezarás a sentir paz mental.
Ahora, todo esto funciona solo si de verdad haces el esfuerzo.
No necesitas más café ni más apps. Necesitas decisiones.
Y si te cuesta mucho hacerlo solo, buscar ayuda profesional siempre es una opción.
No hablo del psiquiatra, hablo de mí.
Alguien que te ayude a desenredar tantas ideas que tienes en la cabeza.
Bueno, el psiquiatra también te ayuda con eso, pero me entiendes el punto.
Un coach que te entienda y que te ayude a enfocarte, a lograr tus metas.
Así hicimos con Ana Karina y si vieras cómo va volando ahora.
Y hace un mes empezamos a hacer con Andrea, y justo esta semana vamos a empezar a publicar para ver resultados concretos.
Y espero hacer pronto con Lorena.
¿Qué tienes que hacer?
Decidirte ya, sin pensarlo tanto, y llenar este formulario.
Te toma menos de 3 minutos y te puede cambiar la vida.
Yo te contacto de vuelta y miramos cómo te puedo ayudar. Te llevo de la mano, como nos gusta cuando tenemos un mentor.
Estoy para ti, de eso se trata.
Ahí te la dejo.
PD1: Sí, tener muchos pendientes da dolor de cabeza.
PD2: Sí, tiene cura.
PD3: Los gerentes también sufren de eso, es normal. Nadie se las sabe todas.
PD4: Menos mal mejoró el clima en Bogotá. Me tenía aburrido tanta llovedera.
PD5: ¿Qué haces leyendo? ¡Llena este formulario, carajo!